Eleodoro de San Pedro Nolasco Fierro nació el sábado, 4 de julio de 1840 en San Francisco del Chañar, Córdoba, Argentina.
Presbítero de la Iglesia católica, académico y periodista que fue uno de los fundadores el 5 de agosto de 1891 de la “Liga Política Unión Cívica Radical” de Córdoba junto a más de un centenar de ciudadanos cordobeses.
Proveniente de una importante familia hacendada del norte cordobés, tras la muerte de su padre se radica en la capital provincial donde inspirado por la figura de su tío toma los hábitos ingresando a la Real y Militar Orden de Nuestra Señora de la Merced.
En 1866, tras su consagración, es nombrado como cura en la iglesia en paraje que lo vio nacer, lugar este en donde tomó contacto directo con la cruel realidad de la zona azotada por la pobreza extrema, la falta de educación y las múltiples enfermedades agravadas por una terrible epidemia de cólera que en dos meses había matado a más de siete mil personas. Allí es donde además de su función eclesiástica también fue enfermero, médico, cocinero, lavandero y hasta el sepulturero del pueblo. Años más tarde, en 1871, en reconocimiento a su labor y sumado a su permanente preocupación y compromiso por defender los derechos de los pobladores más postergados lo llevaría a ser un hombre muy querido y admirado entre los vecinos quienes lo proclaman como presidente de la corporación municipal de San Francisco del Chañar, un cargo semejante al de intendente, comenzando así no solo su actividad política sino también el recelo del “caudillos” de la zona que lo ve como un revolucionario que le puede “hacer sombra” a su poder. Motivo por el cual se inicia una campaña en su contra argumentando que dedicaba más tiempo a la política que a la fe católica. Poco después la cúpula eclesiástica le ordena renunciar al cargo político que ocupa de forma inmediata, cosa que cumple en contra de su voluntad aunque permanece al frente de la parroquia durante seis años más en los cuales continuó con sus confrontaciones con el poder político como con el eclesiástico tanto desde el púlpito como así también como periodista escribiendo en diversos diarios cordobeses de la época que culminaría con la suspensión como sacerdote durante algún tiempo.
En 1874 fue elegido como elector para gobernador y vice de la provincia por el departamento Sobremonte por el Partido Autonomista al que adhirió por algún tiempo.
Levantada la suspensión por parte de la curia, más por presión popular que por mérito, es nombrado canónigo de la iglesia catedral de Córdoba.
Ferviente admirador de Leandro Alem, con quien mantuvo trato frecuente, adhirió a la Unión Cívica primero y luego a la Unión Cívica Radical desde sus inicios y participando activamente de los movimientos revolucionarios encabezados por el radicalismo en Córdoba, lo que le trajo no pocos problemas con la cúpula de la Iglesia cordobesa.
Dedicó numerosos esfuerzos en la organización y reorganización del radicalismo cordobés llegando a estar al frente del mismo en más de una ocasión.
En 1910 a pesar de su avanzada edad emprende un viaje a Europa en compañía de su sobrina que fue becada para estudiar con los mejores maestros de piano de Italia, lugar donde desmejorada su salud muere y es sepultado
Falleció a los 71 años de edad el martes, 8 de agosto de 1911 en Turín, Piamonte, Italia.